Andalucía es una de las comunidades autónomas de España más querida. Son muchos los españoles que la tienen cariño y la elijen como destino turístico. Ahora bien, también es cierto que trabajar en Andalucía no es fácil. Por razones de climatología hay horas del día que lo mejor es quedarse en casa y no salir. Los termómetros llegan a marcar hasta 40 grados. Ante esto, es preciso que se tenga una ley de prevención de riesgos laborales muy severa.
Una de las primeras medidas que se toma es la implantación de la jornada continua. Son horarios de verano que no sobrepasarán las 15.00 horas y que afectarán a 158.400 trabajadores. Málaga es la provincia con más trabajadores afectados, un total de 41.900, que tendrán horario de 7.30 a 14.30h de lunes a viernes durante 40 días hábiles (del 9 de julio al 31 de agosto). Por eso si alguna vez te preguntas por qué no hay obreros o construcciones por la tarde, es por esta razón. Eso sí, los sindicatos piden colaboración a los trabajadores para que denuncien si el empresario no quiere cumplir el horario laboral y siempre lamentan que la Junta tiene para toda Andalucía solo a 24 agentes dedicados a la prevención de riesgos laborales, algo que considera «insuficiente» para un parque de 500.000 empresas en la comunidad.
Estas medidas no solo afectan a la construcción, ya que el sector de la hostelería también se ve afectado por el exceso de calor. La exposición al riesgo de estrés térmico genera problemas de salud para el trabajador expuesto (sudoración excesiva, afecciones cutáneas, disminución de capacidades físicas y mentales, golpe de calor debiendo el empresario aplicar medidas preventivas para evitar esta situación, que la Junta de Andalucía ha puesto en común en una guía.
- Evaluando las condiciones ambientales del centro de trabajo y las climáticas para puestos a la intemperie.
- Diseñar las instalaciones, procesos y equipos de trabajo considerando las temperaturas del entorno.
- Aplicar medidas organizativas para disminuir la exposición a ambiente caluroso
Informar a los trabajadores sobre la carga de trabajo y el nivel de estrés por calor.
- Prever periodo de aclimatación.
- Utilizar ropa ligera y protección personal.
- Automatizar procesos, aislar fuentes de calor.
- Instalar ventiladores, aire acondicionado, extractores.
- Beber agua de forma periódica.
- Rotar en puestos con riesgo por el calor.
- Distribuir el volumen de trabajo en horas de menor calor (mañana y/o tarde).
Un excesivo nivel de temperatura ambiental por exposición solar o emisión de calor en la propia actividad, que exija al organismo un esfuerzo reiterado por la utilización de estas facultades, siendo insuficiente para evitar la hipertermia, con origen en el exterior o en el propio metabolismo, lo que viene a provocar daño para la salud de los trabajadores que se manifiestan en síntomas con una gravedad variable según el tiempo de exposición y la insuficiencia para disipar el calor, pudiendo manifestarse como:
- Deshidratación.
- Trastornos psiconeuróticos.
- Eritema y sarpullido por calor.
- Calambres.
- Agotamiento.
- Golpe de calor – insolación.
Trabajos en altura
Cuando se realizan trabajos en altura, sobre andamios, plataformas elevadoras, escaleras, cubiertas, etc., debe tenerse en cuenta que fenómenos como la lluvia intensa o el granizo, pueden tener un efecto perjudicial sobre la seguridad del equipo o exponer directamente a las personas a un peligro.
En las plataformas elevadoras, el suelo, incluida la trampilla si dispone de ella, debe ser de material antideslizante y permitir la salida de agua (por ejemplo, enrejado o material perforado). Para evitar resbalones, debe realizarse un adecuado mantenimiento y eliminar los materiales que quedan adheridos al enrejado.
Asimismo, las plataformas de los andamios también deben ser antideslizantes y estar perforadas para evitar que se acumule el agua.
De ahí que las empresas tienen que tener un protocolo perfecto para actuar en estas situaciones. Empresas como Workprotec, especialista en trabajos de altura, cuenta con un equipo humano de profesionales altamente cualificados para garantizar el mejor servicio, con más de 15 años de experiencia en el sector.
Los trabajos con técnicas de acceso y posicionamiento mediante cuerdas, generalmente, son realizados a la intemperie, por lo que también pueden verse afectados por las condiciones climáticas. Es importante destacar que las cuerdas utilizadas en este tipo de trabajo, cuando se utilizan mojadas, por ejemplo, por efecto de la lluvia, pierden resistencia por encima del 25% de su resistencia original. Si además se hielan, aún se fragilizan más.