Hacer manualidades es el hobby preferido de muchas personas. Una actividad que, a la par de relajante, les permite volcar su creatividad en objetos palpables a los que con frecuencia buscamos una utilidad en casa o exhibimos como un bonito adorno. Cuando haces manualidades, el acabado es un paso decisivo. Pueden realzar el objeto o defenestrarlo. Vamos a hablar precisamente de eso. De las mejores pinturas que hay para darle a tus creaciones un aire artístico.
Los que hemos hecho manualidades alguna vez sabemos que los materiales son un aspecto determinante. Más allá de la pericia, que se termina adquiriendo con la práctica, los productos que utilices son fundamentales. Yo, por mi parte, que he trabajado con cuero y con madera suelo comprar gran parte de mis materiales en Artespray. Una tienda online de materiales para bellas artes y manualidades de las más completas que he visto. En lo que se refiere a pinturas, su catálogo es fabuloso. Allí encontré pintura acrílica con los colores que usaba Van Gogh para pintar un joyero que hice en marquetería.
Antes de seguir, quiero dejar claro que en este artículo no voy a hablar de marcas. Prefiero centrarme en comentar tipos de pinturas, sus características y sus usos. Dependiendo del tipo de trabajo manual que realices, es más aconsejable un tipo de pintura u otro. No es lo mismo decorar una taza de arcilla que pintar sobre tela.
Dicho esto, estas son los mejores tipos de pinturas para manualidades.
Pintura acrílica.
La pintura acrílica es una de las más sencillas de usar y tiene una amplia variedad de aplicaciones. La podemos usar igual para decorar barro cocido o seco como para pintar sobre tela tratada.
Es una pintura con base de agua, pero una vez seca adquiere un aspecto plástico que la hace impermeable.
Tiene una amplia cobertura y desde un principio nos da una idea bastante clara de cómo va a quedar el color. Es decir, no pierde intensidad con el secado, como sucede con la acuarela. Un detalle que debemos tener en cuenta es que para dar una mano sobre una superficie pintada, debemos esperar que se seque la mano anterior para no arrastrar la pintura. Por suerte, la pintura acrílica tiene un secado rápido. En media hora ya ha endurecido.
Una de sus ventajas es que no requiere imprimación previa. La podemos aplicar con pinceles sobre una amplia variedad de materiales: escayola, barro, madera, cartón, papel, piedra, resina, cuero, etc.
En algunos materiales porosos corremos el riesgo de que se descascarille y forme costra. Para evitarlo lo mejor es pintar con el pincel escurrido o utilizar una esponja para aplicarlo. Dando golpecitos de imprimación sobre la superficie. Con paciencia y a base de dar varias manos, el color se queda uniforme.
Con la pintura acrílica obtenemos colores vivos y tonos brillantes. Tal vez, esa apariencia plastificada que deja al final no sea del agrado de algunos. Pero para eso tenemos otras alternativas que iremos viendo a continuación.
Pintura al óleo.
Muchos pueden pensar que la pintura al óleo es exclusiva para pintar cuadros, como hacía Velázquez, pero no es así. Con este tipo de pintura podemos decorar muebles y objetos de cerámica.
Lo mejor de esta pintura es que suele dejar un aspecto bastante profesional. Sus acabados son brillantes y sus colores intensos, aunque no dejan esa apariencia plástica que sí lo hace la pintura acrílica.
Si queremos pintar un mueble, u otro objeto de madera, con pintura al óleo, lo primero que debemos hacer es tratar la superficie. Debemos cerrar los poros de la madera para que no absorban el aceite de la pintura y terminen atrapando la humedad. Este paso previo permitirá que la pintura dure por más tiempo y que el objeto pintado no se estropee, dando lugar a que aparezca moho o carcoma.
La imprimación previa la podemos aplicar con aceite de linaza, o con trementina. El aceite de linaza crea una película protectora en la madera que la separa de la pintura al óleo.
La trementina es una especie de barniz que sella los poros de la madera y acondiciona la superficie para poder pintarla. Tiene un alto contenido de disolvente, por lo que es habitual que desprenda vapores al aplicarla y durante el secado. Debemos evitar inhalar estos vapores, ya que son tóxicos. Para ello debemos pintar el objeto al aire libre o en un lugar bien ventilado y ponernos una mascarilla mientras aplicamos la imprimación.
Aerosoles.
La pintura en espray es uno de los métodos de decoración preferidos por muchos artesanos y aficionados a las manualidades. Permite cubrir grandes superficies en poco tiempo, termina dando un acabado uniforme y es apta para una amplia variedad de materiales: metal, vidrio, plásticos, madera, etc.
Tiene también la ventaja de que dispones una gran cantidad de tonos y colores entre los que escoger. Con acabados mates y acabados de brillo. Con el espray puedes llegar a rincones que son difíciles de pintar con brocha.
Yo, personalmente, rara vez he utilizado el espray. Me da la sensación de que es una técnica con la que no controlo bien la pintura que aplico. Algo que si consigo si pinto con pincel, brocha o con esponja. Aun así, doy fe de que los aerosoles tienen una nutrida legión de defensores. Eso sí, hay que tener cuidado al utilizarlo. La revista Mejor con Salud nos indica una serie de precauciones que hay que observar para pintar con espray. Son las siguientes:
- Leer bien las instrucciones del producto. Antes de aplicarlo nos viene bien detenernos un momento y leernos las instrucciones del fabricante.
- Pintar en un lugar con ventilación. El bote de espray al accionarlo desprende diminutas gotas de pintura y gas a presión que es nocivo para el organismo. Debemos, por tanto, pintar en exteriores o en un lugar donde corra el aire.
- Usa protección. Utiliza guantes, gafas protectoras y mascarilla cuando vayas a pintar con espray. Además, lleva puesta una ropa que no te importe que se manche con pintura, puesto que inevitablemente algunas gotas te van a salpicar.
- Cubre el suelo y los objetos cercanos con plástico o papel. Si no queremos dejar todo perdido con pintura, que luego nos va a costar quitar, debemos acondicionar la zona para que no se vea afectada por pequeñas gotas de pintura.
- Agita bien antes de usar. Los botes de espray contiene gas a presión son partículas de pintura. La pintura por el peso queda en la base del bote. Debemos agitar bien el bote antes de usarlo y repetir la operación de vez en cuando.
- Limpia y seca bien la superficie a pintar. Debemos evitar que la superficie que vamos a pintar esté sucia o contenga polvo.
- Haz pruebas antes de usar el producto. Antes de pintar el objeto que vas a decorar, haz pruebas sobre un papel desechable o material que no necesites para familiarizarte con el producto. Para ver con que intensidad debes apretar el botón difusor, a qué distancia te has de colocar, etc.
Pintura para vidrio.
Bien sea que estás trabajando con vidrio o que quieres pintar un cristal o un objeto de este material, debes saber que para pintar sobre vidrio necesitamos una pintura específica.
Debe ser un tipo de pintura que se adhiera a superficies no porosas y que sea impermeable.
El blog sobre artesanía Nuevo Estilo opina que el mejor tipo de pintura para pintar cristal es una pintura acrílica que haya sido diseñada para este fin. Es decir, no nos vale cualquiera. De todos modos, en el mercado podemos encontrar una amplia variedad de formatos. Desde tubos de pintura acrílica que podemos aplicar con pincel, hasta rotuladores.
Para hacer un trabajo fino es recomendable delimitar la zona que vamos a pintar con cinta de carrocero. Existen plantillas autoadhesivas con figuras preformadas que nos facilitan el trabajo, en el caso de que queramos añadirle detalles.
Piensa que aunque tengas buen pulso, el vidrio es una superficie resbaladiza y la pintura se puede correr mientras la aplicamos o con el secado.
Pintura para tela.
La tela es otro material interesante para decorar con pintura. Hay personas que personalizan sus camisetas pintando sobre ellas o que le dan un toque artístico a su mantelería con pintura.
El textil es otro material que requiere una pintura específica. Debe ser una pintura que soporte bien los lavados y que sea resistente a los rayos ultravioleta.
Para pintar sobre tela, la pintura más utilizada es una pintura acrílica diseñada para este material. Como sucede con la pintura para vidrio, en el mercado encontramos una gran cantidad de soportes. Desde botes de pintura que aplicamos con pincel, hasta rotuladores con tinta permanente para tela.
Para pintar sobre tela es importante mantener la superficie tensa, que no presente ningún tipo de arruga. Para ello lo mejor es utilizar un bastidor. También es interesante delimitar los contornos con un dibujo con rotulador y después pintar el interior.
Como vemos, cada material de manualidades requiere una pintura determinada.