Marbella vive un buen momento en lo laboral. El pasado mes de julio lo cerró con más de 10.000 contratos de trabajo, lo que supone el mejor dato de un mes desde que se tienen registros, enero de 2009. Está claro que, ahora sí, ya se puede decir que la crisis ha pasado. Hay que destacar el incremento de la contratación del 9,1 por ciento respecto al mismo mes de 2017 al aumentar en 845 contratos desde los 9.217 de julio del pasado ejercicio a los 10.062 del pasado julio. Hay que congratularse porque Marbella nunca había pasado la barrera de los 10.000 contratos en un solo mes desde que existe este tipo de registro.
Marbella logra también el menor índice de desempleo desde julio de 2008, al situarse en 9.274 parados y bajando por séptimo mes consecutivo. En la comparación interanual hay un descenso del paro de 529 personas al bajar desde los 9.803 de junio de 2017 a los 9.274 de julio de 2018, lo que supone un descenso del paro del 5,4 por ciento, según el Ayuntamiento. Está claro que esta ciudad malagueña vive uno de los mejores momentos de su historia, pero construido desde el trabajo estable, no el que se producía en las épocas de Jesús Gil y sus sucesores. Por eso hay que seguir trabajando para mejorarlos. Hay que seguir haciendo estudios de diagnóstico formativo que muestren las necesidades de los distintos sectores económicos.
En Málaga hay trabajo
Lo mismo ocurre con Málaga como provincia. La Encuesta de Población Activa (EPA) revela que la provincia sumó entre abril y junio 34.700 ocupados, lo que representa el segundo mayor crecimiento del empleo en un solo trimestre de toda la serie estadística (que empezó en 2002). El mayor se produjo en el segundo trimestre de 2014, cuando se crearon 37.300 puestos de trabajo. Málaga concentra así, por sí sola, más de la mitad de los empleos creados en toda Andalucía en estos tres meses (que son 64.700).
Con todos estos datos, Málaga se ha convertido en una salida para encontrar trabajo. En mi caso lo encontré como camarero en un bar de Puerto Banús. Mi experiencia laboral me permitía que fueran muchos los establecimientos que me llamaran. No sé si habéis estado alguna vez en esta zona de Marbella, si lo habéis hecho, sabréis que es uno de los sitios con más glamur de España. Si no habéis estado, ahora mismo os recomiendo que vayáis. Ahora bien, se curra de lo lindo. Desde por la mañana ya hay trabajo. En horario de comidas también suele desfilar mucha gente, aunque cuando más curro hay es por las noches.
Los días de descanso
También es cierto que disfruto de dos días de descanso, dos días de descanso que uso para salir de fiesta con otros trabajadores de la zona. Lo mejor es que cuando vas a otros bares te hacen ofertas descuentos en comida y bebida. Así que genial. Ahora bien, como os digo el trabajo es duro. En mi caso he tenido que acudir al Centro de Masaje y Bienestar Estética para que me den unos cuantos masajes en la espalda, que es la parte de mi cuerpo que más lo acusa. Usan unas técnicas que ayudan a trabajar sobre las tensiones musculares, ayudando también a desbloquear líneas energéticas (Meridianos de Acupuntura) y articulaciones; mejora el drenaje de fluidos (linfa, sangre) y optimiza el funcionamiento de los órganos. Acabo como nuevo, justo para empezar una nueva jornada laboral.
Ahora bien, si quieres, en Marbella hay trabajo. Eso sí, vete con la idea de que tienes que trabajar mucho. El sueldo es bastante alto y puedes hacer hucha durante los meses de verano para luego pasar un invierno con un buen colchón. Es de agradecer que Málaga y sus municipios vuelvan a tener el poderío que tuvieron hace años, pero en esta ocasión, como decía antes, sobre una base sólida, y no sobre el pelotazo que se dio hace ya unas décadas donde lo único que importaba era el construir y acudir al despacho del concejal de turno en el Ayuntamiento para ver si se pillaba algo. Málaga sigue creciendo y eso a mí me encanta.