El Turismo es uno de los principales motores de la economía andaluza. De hecho, según los datos oficiales de la Junta de Andalucía se estima que el número de visitantes fue de unos 29,5 millones, cifra que no solo beneficia a la Comunidad Andaluza sino también en su conjunto a toda la sociedad española.
Andalucía es una de las regiones con mejor tiempo, para los amantes de la playa y los días soleados. Además, cuenta con innumerables rincones, por lo que si se quiere descubrir cuanto más se organice el viaje mejor si se quiere exprimir el encanto de su naturaleza e historia.
A quienes sean amantes de la arquitectura y la historia no podrán faltarle sus antiguos palacetes en los cascos medievales de las ciudades, o los cortijos de época en las serranías. En cualquier caso, es importante discernir cuál es el tipo de turismo que más se adapta a nuestros gustos e intereses.
Y es que, el turismo se ha distribuido en muy diferentes segmentos y tipologías, es de interés el crecimiento en el denominado turismo de lujo, en el que prima el turismo extranjero que ha encontrado en Andalucía una oferta exclusiva, privacidad, excelente servicio e infraestructuras modernas.
Esta es la apuesta de alojamientos como son los hoteles boutique, alojamientos exclusivos y personalizados que se alejan de la concepción de muchos otros alojamientos que no cuidan el detalle.
Alojamientos como Mercer Sevilla que se ubican en la Casa Palacio Castelar, ejemplifican a la perfección esta apuesta por el turismo de lujo. De hecho, se trata de alojamientos que se encuentran, por lo general, en enclaves de relevancia histórica, como es el caso de este hotel en un Palacete del Siglo XIX.
Precisamente esa visión por integrar lo antiguo con lo moderno es una de las características distintivas de esta cadena hotelera con lo que ofrecen una experiencia única a sus huéspedes para que disfruten de la belleza y tradición de Andalucía desde otra perspectiva.
Turismo Cultural y Gastronómico
Si el Turismo de Lujo empieza a tener cada vez más calado lo mismo ocurre con otros tipos de turismo como el Turismo Cultural y el Gastronómico, sobre todo con un toque más local. La finalidad de estos tipos de turismo es la de acercar al visitante a disfrutar de la ciudad, apreciar su cultura y experimentar una nueva forma de vivir. Se trata de un tipo de turismo menos estacional, ya que puede realizarse en cualquier época del año.
Este tipo de turismo está relacionado con otro que ve también un importante crecimiento, el Turismo Gastronómico.
Los amantes de este tipo de turismo buscan descubrir y disfrutar de la Gastronomía pero de una forma especial y apuntando más a los productos locales y recetas más tradicionales de la región.
Se trata de personas que valoran “el saber hacer” de cada localidad o región, y no solo quieren disfrutar de la riqueza gastronómica sino también compartir estas experiencias con la comunidad local.
Es popular la amplia y rica cultura gastronómica del Valle del Guadalquivir con aperitivos tan populares como el salmorejo cordobés o primeros platos que van de carnes, guisos, como el rabo de toro, a espinacas con garbanzos o deliciosos postres como las yemas o la naranca del Valle del Guadalquivir.
Otra tendencia en alza es la del Ecoturismo que le permite al visitante retomar el contacto con la naturaleza que, poco a poco se va perdiendo con la tendencia a vivir en grandes ciudades.
Disfrutar de estar en contacto con la naturaleza y practicar actividades o deportes en un entorno natural es cada vez la opción más deseada por muchas personas para sus días de ocio.
De ahí que se ofrezcan muchas y diferentes actividades, desde deportes acuáticos de todo tipo a rutas en la naturaleza por diferentes destinos de la región.
Los deportes al aire libre son uno de los puntos fuertes en una comunidad en la que el buen tiempo es uno de sus aspectos más identificativos.
Esta es la razón de que haya tanta oferta de actividades de deporte al aire libre, circuitos multiaventura y todo tipo de rutas de piragüismo, instrucción de surf, paddle surf o kitesurf, entre otras.